Antes de entrar en el cielo o en el infierno, a los hombres les toca esperar ante dos puertas según hayan sido "dominados por la mujeres" o "dominadores".
Llega un tipo nuevo a la antesala del cielo y ve que la cola de los dominados por las mujeres es larguísima, y que frente a la puerta de los dominadores hay un solo hombre.
Se acerca y le pregunta:
- ¿Qué hizo para merecer estar frente a esta puerta?
- No sé. Mi mujer me dijo que me pusiera aquí.
No hay comentarios:
Publicar un comentario